miércoles, 26 de marzo de 2014

Poemas

LA LUNA, SIEMPRE
Redonda, hinchada de frotarse contra el cielorasga mi piel con su delgada luz Cae sobre mi pelo con la levedad de una sirena que no se hubiera dado cuenta que no posee piernasSolivianta mi sangre me enciende de locura me regala una piel fosforescente y me convierte aceite hirviendo en fauna (cascos y cuernos y cabello desbocado bajo el lúbrico soplo de lo oscuro)

No hay comentarios:

Publicar un comentario